domingo, 30 de noviembre de 2014

Last Chance




Imagen obtenida por Opportunity en Marzo 2004, Sol 39. Meridiani Planum. Roca bautizada como "Last Chance" Estas concreciones minerales y otras texturas en esta roca proporcionaron pruebas acerca de las condiciones ambientales húmedas en el pasado antiguo de Marte.

viernes, 28 de noviembre de 2014

Future Martian Base


Área de descanso: Dormitorio/Office/Gimnasio. 

En este sector del Hábitat, dividido a su vez en tres compartimentos y comunicados por escotillas, pondremos en práctica el mantenimiento físico. Nuestro explorador deberá descansar de 6/8 horas diarias (incluye el aseo personal), 2 horas de ejercicio físico y 1 hora para las tres comidas diarias. Será recomendable que estas tareas se realicen, si no se realizan adecuadamente, nuestro cosmonauta sufrirá las consecuencias; poniéndose enfermo y retrasando la misión etc. 

Dormitorio 
Es necesario para el descanso y aseo personal, para un buen estado físico y mental. Estará ubicado en el extremo opuesto de la zona del Hábitat cercana a la Antena (para evitar las ondas de radiofrecuencia que pueden afectar al cerebro) Tendrá dos escotillas de acceso; a la de la Sala de Comunicaciones y el Office. Comprenderá un pequeño habitáculo con todo lo necesario para el aseo personal; ducha, lavabo e inodoro y una litera desplegable de una pared. 

Mantenimiento: 
-Limpieza de aseo. 
-Estado de la escotilla de acceso al Office. 
-Nivel adecuado de presión. 

Office 
Este compartimento estará destinado a almacenar la comida con la misma preparación que se utiliza para los astronautas en sus largos vuelos espaciales. estará herméticamente cerrada y conservada en cajones refrigerados debidamente catalogados. Los alimentos fueron enviados también previamente de la llegada de nuestro explorador e integrados en el Hábitat. Se caracterizarán por su composición en altos niveles de hidratos de carbono, ya que no dispondremos de carne en Marte. También serán ricos el calcio y magnesio, vital para los huesos .El office dispondrá de una mesa-comedor, una silla y de los cajones refrigerados con los alimentos. 

Mantenimiento: -Limpieza del Office. 
-Estado de refrigeración de los alimentos. 
-Nivel adecuado de presión. 
-Estado de las escotillas de acceso al Gimnasio. 

Gimnasio 
El planeta Marte posee la mitad de masa que la Tierra, por lo tanto la fuerza de gravedad (peso) que influirá en el cuerpo de nuestro explorador será la mitad, es decir, su peso será la mitad. Esto tendrá consecuencias en la masa muscular y la masa ósea del esqueleto. En el primer caso, se perdería fuerza física para movernos y en el segundo, la pérdida de calcio en los huesos tendría un alto riesgo de sufrir fracturas. Es por tanto de vital importancia el ejercicio físico diario que tendrá que realizar nuestro cosmonauta. Para ello, el Gimnasio dispondrá de los siguientes aparatos; 

1. Cinta de correr para fortalecer el tono muscular. Estará provista de unas gomas adheridas a la cintura que tirarán hacia abajo con una fuerza proporcional al peso que le falta a su cuerpo, de este modo, es como si corriese en la Tierra. 
2. Ergómetro máquina que simula el ejercicio de remar. Este aparato fortalece las extremidades (brazos y piernas) 
3. Banco de pesas para realizar ejercicios de resistencia y fuerza que pone los músculos, articulaciones y tejidos bajo mucho estrés de intensidad, de este modo aumentará en nivel de práctica de ejercicio de los dos anteriores aparatos. 

Mantenimiento: 
 -Estado de las máquinas. 
 -Nivel adecuado de presión.

Desirée

martes, 18 de noviembre de 2014

Próxima parada: Fobos



Pregunta a cualquier entusiasta de la exploración espacial, y la mayoría dirá que el destino de la humanidad está en Marte. Pero, actualmente, la NASA se está preparando para ir a un asteroide. Aunque la agencia espacial dice que su iniciativa para visitar un asteroide ayudará en el objetivo eventual de poner gente en Marte, ¿qué tal si, en vez de ir a un asteroide, fuéramos a la luna marciana Fobos? 

Los científicos planetarios Scott L. Murchie, Daniel T. Britt y Carle M. Pieters han aunado fuerzas en un artículo para explicar el supuesto de una misión a Marte, específicamente a Fobos. “Fobos ocupa una posición física, científica, y programáticamente única en el camino a la exploración del Sistema Solar”, dicen los científicos. Además, las lunas pueden ser posiblemente una fuente de recursos in situ que podría ayudar a la futura exploración humana en el espacio alrededor de Marte o en la superficie marciana. Pero una misión de retorno de muestras en primer lugar podría proporcionar detalles acerca de los orígenes y composición de las lunas. 



Las lunas marcianas son enigmáticas, están envueltas en misterios. Fobos y su hermana Deimos parecen ser asteroides que fueron capturados por Marte, y son los únicos del Sistema Solar interior que aún no han sido estudiados por una misión dedicada. Pero, ¿deberían las lunas ser exploradas por sobrevuelos o retornos de muestras? Las publicaciones y conceptos de misión a Fobos y Deimos son numerosos y se remontan décadas. Los autores de este nuevo estudio exploran toda la amplitud de preguntas sobre por qué y cómo explorar Fobos y Deimos. Dr. Murchie es el investigador principal del instrumento CRISM del Mars Reconnaissance Orbiter, un espectrómetro en el rango visible/infrarrojo. Él es un científico planetario del Laboratorio de Física Aplicada de John Hopkins (APL) que ha estado a la vanguardia de los esfuerzos por desarrollar una misión a Fobos. Los autores Dr. Britt, de la Universidad de Florida Central, y Dr. Pieters, de la Universidad Brown, se unieron con APL y el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) en propuestas de misión a Fobos/Deimos. Los científicos de APL no son los únicos interesados en Fobos o Deimos. 

El Laboratorio de Propulsión a Chorro, el Centro de Investigación Ames y el Instituto SETI también han propuesto varias misiones a estas pequeñas lunas. Cada centro de NASA ha estado involucrado en algún nivel. Pero la única misión que ha despegado ha sido Phobos-Grunt de la Agencia Espacial Europea (ESA). La misión rusa fue lanzada el 9 de noviembre de 2011, pero fracasó y dos meses después terminó en el Océano Pacífico. El sistema de propulsión falló en ejecutar los encendidos de motor necesarios para escapar de la gravedad de la Tierra y su órbita decayó a pesar de semanas de intentos para activar la sonda. Pero esa es otra historia. 

El artículo de los tres científicos planetarios habla en primer lugar de los orígenes de las lunas de Marte. Nadie está seguro. Hay un fuerte consenso de que la luna terrestre nació de la colisión de un objeto del tamaño de Marte con la Tierra poco después de la formación de nuestro planeta. Esta es solo una posibilidad para las lunas marcianas. Murchie explica que los impactos que crearon las grandes cuencas y cráteres en Marte podrían haber dado origen a Fobos y Deimos: las eyecciones que alcanzaron la órbita, formaron un anillo y luego se aglomeraron en pequeños cuerpos. 

Las teorías alternativas afirman que las lunas fueron capturadas por Marte, procedentes ya sea del Sistema Solar interior o exterior. O podrían haberse formado por acreción junto con Marte a partir de la nebulosa solar. Murchie y los coautores describen las dificultades e implicaciones de cada escenario. Por ejemplo, si fueron capturadas por Marte, es difícil explicar cómo es que sus órbitas llegaron a ser “casi circulares y casi ecuatoriales con periodos rotacionales síncronos”. Para responder la cuestión acerca de los orígenes, el paper analiza su naturaleza. Murchie explica que el limitado conocimiento que tenemos acerca de su composición, deja abiertas varias posibilidades para sus orígenes. Las lunas marcianas parecen asteroides tipo D del cinturón de asteroides. Sin embargo, las lunas de Marte son muy secas, libres de agua, al menos en sus superficies. 



Los sobrevuelos de Fobos y Deimos realizados por naves de NASA y ESA son simplemente insuficientes para tener un panorama claro de su composición o estructura, por no hablar de sus orígenes, explican los científicos. Si las lunas fueron capturadas, entonces tienen composiciones diferentes de la de Marte; no obstante, si se formaron junto con o a partir de Marte, entonces tendrán composiciones similares a la del Marte primitivo, o al material de la corteza marciana, respectivamente. El paper describe con cierto nivel de detalle el problema de los miles de millones de años de acumulación de polvo marciano. Cada vez que Marte ha sido impactado por un gran asteroide, una nube de escombros es lanzada al espacio. Parte del polvo cae de vuelta al planeta, pero una gran cantidad termina en la órbita. Cada vez, algunos de los escombros terminaron chocando con Fobos y Deimos; Murchie usa el término “placa testigo” para describir la relación de las dos lunas con Marte. Hay una acumulación de material marciano y también material de los objetos que impactan el planeta en las superficies de las lunas. 

Las imágenes de sobrevuelos de Fobos muestran una superficie rojiza similar a la de Marte, y numerosos rastros a lo largo de la superficie, como si objetos hubiesen rodado por allí. Sin embargo, el tinte rojizo podría deberse a la acción del flujo solar durante miles de millones de años. El artículo continúa analizando cómo las misiones a las lunas podrían mejorar nuestra comprensión de su composición y orígenes. A pesar de cuán bien los ingenieros de NASA y ESA han trabajado para encoger y aligerar los instrumentos que orbitan y aterrizan en Marte, retornar una muestra de Fobos a la Tierra permitiría análisis mucho más detallados. 



Fobos, orbitando a 9.400 km, y Deimos a 23.500 km sobre Marte evitan la necesidad de los “7 minutos de terror” de entrada, descenso y aterrizaje que experimentó Curiosity, y le permiten a una nave usar menos energía para escapar de la gravedad y volver a la Tierra. Además, hay interés en usar Fobos como una fuente de recursos; agua, material para el combustible de los cohetes o materiales de construcción. El paper analiza el potencial de Fobos como recurso para los viajeros espaciales (“In Situ Resource Utilization”, ISRU), en el contexto de su composición, cómo el flujo solar pudo haber quitado el agua de las lunas o cómo los escombros de los impactos en Marte cubren materiales de mayor interés y valor para los exploradores. 

Con tantas preguntas e intereses, ¿qué misiones han sido propuestas y exploradas? El artículo describe media docena de misiones, pero hay muchas otras que han sido concebidas y propuestas en algún nivel con el paso de varias décadas. En la actualidad hay al menos una misión que busca activamente financiación. La propuesta de SETI y el centro Ames, PADME (Phobos and Deimos & Mars Environment), liderada por Dr. Pascal Lee está compitiendo en el programa Discovery en busca de financiación. Tales proyectos deben tener un costo límite de $425 millones o menos y ser capaz de lanzarse en menos de tres años. Ellos proponen el 2018 como año de lanzamiento, a bordo un cohete Falcon 9 de SpaceX. El diseño de la misión PADME reutilizaría el hardware y la experiencia adquirida por la misión LADEE, sin embargo, el objetivo de ésta no es regresar una muestra de Fobos. PADME se mantendría en una órbita sincronizada con Fobos y luego Deimos para realizar repetidos sobrevuelos. 

Probablemente la misión esté en el rango de los $300 millones. Stardust, una misión relevante debido a su cápsula de retorno de muestras, fue lanzada en 1999 y tuvo un costo que probablemente alcanzó un nivel similar hacia el final de la misión en 2012. La Agencia Espacial Rusa está intentando obtener financiamiento para Phobos-Grunt 2, pero la fecha posible de lanzamiento ha sido postergada hasta 2022, y ahora posiblemente 2024. Además, cada uno de los autores del artículo ha participado en propuestas de misión, las cuales son descritas en el paper. Pieters, JPL, y Lockheed-Martin propusieron la misión Aladdin, mientras que Britt de APL, junto con Lockheed-Martin, propusieron a Gulliver; ambas reutilizarían la cápsula de retorno de muestras de Stardust. Murchie también describe su concepto de misión APL/JPL llamada MERLIN (Mars-Moon Exploration, Reconnaissance and Landed Investigation). 



Fobos y Deimos son los últimos dos de lo que podríamos objetos mayores del Sistema Solar interior que no tienen misiones dedicadas de exploración. Varios cuerpos del cinturón de asteroides han sido sobrevolados, y Dawn se aproxima a su segundo objetivo, el asteroide más grande de todos, Ceres. Así que más temprano que tarde, una sonda de algún país se dirigirá a las lunas de Marte. Las misiones que apuntan a Fobos o Deimos probablemente incluirán sobrevuelos a ambas lunas y una o más misiones de retorno de muestras. Una misión estadounidense con retorno de muestras en el programa Discovery será ajustada para cumplir con los criterios; un costo de $425 millones y un periodo de desarrollo de tres años. Aquellas que utilizan el diseño de Lockheed-Martin para Stardust tienen una cápsula de retorno, estructura y sistemas que ya han sido probados y que permitirían abaratar costos y ahorrar tiempo. Esto incluye cinco generaciones de software de vuelo de Lockheed-Martin que mantiene un legado de misiones exitosas que abarca a Mars Odyssey, Genesis, Spitzer y MAVEN. 

Las tres propuestas de los autores del artículo podrían ser mejoradas, volver a ser propuestas y competir una contra otra. Las tres podrían usar diseños pasados de Lockheed-Martin. La cooperación al escribir este artículo puede ser un indicador de que unirán fuerzas, combinarán conceptos, y compartirán posiciones en un único proyecto liderado por NASA. La lucha por dólares federales sigue siendo una dura y apretada batalla y con el programa de vuelo espacial tripulado luchando por una nueva base después del transbordador espacial, los dólares para misiones interplanetarias siguen siendo muy disputados. No obstante, parece posible una misión a Fobos y/o Deimos dentro de los próximos diez años.

cosmonoticias

lunes, 17 de noviembre de 2014

Future Martian Base



SALA DE CONTROL Y COMUNICACIONES 

Esta sala estará dedicada a las comunicaciones con la Tierra, la nave nodriza, la luna Fobos y al control del mantenimiento del La Base (interior y exterior) y a todos los aspectos relacionados con el planeta rojo. 
Se recibirán instrucciones desde la Tierra y se enviarán datos a la nave nodriza y a la explotación minera en la luna Fobos. 

A ambos lados de la Sala se ubicarán dos mesas electrónicas. Una estará dedicada a los paneles de control y la otra mesa a los paneles de comunicación. En medio de ambas, una silla móvil para acceder a las mesas electrónicas con rapidez y comodidad. Todos los compartimentos del Hábitat y del resto de estructuras exteriores, tendrán un panel informativo que estarán conectados a esta sala. Por ejemplo; si nos encontramos trabajando en el Laboratorio o estamos en cualquier compartimento del Hábitat y la sala de control y comunicaciones nos tuviera que informar de algún fallo de presión, nivel de oxígeno o alguna fuga en el casco exterior, nos enviaría los datos directamente a los paneles de información, acompañados de un la iluminación roja y un sonido de alerta. 
Si estamos en el exterior, nuestro traje exploración recibiría dicha información. En caso de alerta, el explorador deberá solucionar el problema en un tiempo estimado. 

-Panel de control 1: 
Estado del mantenimiento de La Base interior (presión, oxígeno, etc) Si existiera un fallo de mantenimiento en el interior del Hábitat o en el interior de las estructuras (Laboratorio, Rover, Invernadero) este panel nos lo indicará. 

-Panel de control 2: 
Estado de mantenimiento de La Base exterior. Estructuras exteriores (cascos del Hábitat, Invernadero, Laboratorio, Rover y su control remoto, Antena de comunicaciones) 

-Panel de comunicación 1: 
Se recibirán instrucciones o información en las comunicaciones con la Tierra. En este panel se monitorizará el seguimiento psicológico. 
La evaluación psicológica formará parte del buen estado metal de nuestro explorador. Surgirán momentos de estrés por el trabajo, frustración por no alcanzar los objetivos a tiempo o claustrofobia debido a su largo aislamiento. La evaluación psicológica será un proceso de seguimiento por parte de un psicólogo especializado desde la Tierra. Las sesiones se realizarán una vez por semana. Se controlará el nivel de; frustración (incumplimiento de los objetivos), ansiedad (relacionada con la supervivencia), estrés (repercute negativamente en el estado físico) y claustrofobia (consecuencias negativas de estar siempre en el mismo lugar) Este último aumentará de nivel cuando esté en el interior del traje. Podremos observar en todo momento los indicadores psicológicos en nuestra pantalla de navegación tanto interior como exterior. Si durante la semana aumentaran sustancialmente los niveles antes de su correspondiente sesión, nuestro explorador tendrá que acudir a la Sala de control y comunicaciones para una evaluación urgente.

-Panel de comunicación 2: 
Comunicaciones con la nave nodriza y la explotación minera de la luna marciana Fobos. Los cambios ambientales de la atmósfera se mostrarán también en este panel. 
En esta sala también se realizará un cuaderno de vida que consistirá en registrar todo el trabajo realizado durante el día. El cuaderno es beneficioso ya que pudiera nuestro explorador olvidar realizar alguna labor esencial en la base. 

Y por último, la sala dispondrá de una pantalla que rodeará toda el perímetro de dicha sala para realizar el mapeo del planeta con imágenes en 3D. Las imágenes serán enviadas por la nave nodriza que a su vez ésta se comunicará con las sondas que orbitan Marte. En esta sala hemos ubicado las dos únicas ventanas del Hábitat ya que debido a la complejidad e importancia de las comunicaciones y el control de La Base, deberá tener una iluminación lo más natural posible, y al mismo tiempo, una visión directa del exterior del Hábitat. 

Mantenimiento: 
-Informático del hardware y software de los equipos electrónicos. En la misma sala se dispondrá de  recambio necesarios. 
-Estado de las escotillas de acceso al área de Descanso. 
-Nivel adecuado de presión de la sala. 

Desirée

El clorometano de Curiosity




La materia orgánica detectada por el rover Curiosity en Marte no es probablemente debida a contaminación traída desde la Tierra, como los investigadores pensaron en un principio. 

Un equipo de científicos alemanes y británicos dirigidos por el geocientífico Frank Keppler, de la Universidad de Heidelberg, sugiere que un compuesto gaseoso con cloro orgánico -clorometano- encontrado en el Planeta rojo viene del suelo de Marte, con carbono e hidrógeno probablemente derivado de los meteoritos que cayeron sobre la superficie del planeta. 

Esta hipótesis se apoya en las mediciones de isótopos realizadas por los científicos en las que se replicaron algunos de los experimentos del módulo de aterrizaje en Marte. En estas investigaciones se utilizaron muestras de un meteorito de 4.600 millones de años que cayó en Australia en 1969. Los resultados de este estudio han sido publicados en Scientific Reports. 

La cuestión de si hay materia orgánica en Marte, un requisito esencial para la vida en este planeta, ha sido debatida por la comunidad científica durante mucho tiempo. Para abordar esta cuestión, el rover Curiosity de la NASA, que aterrizó en Marte en agosto de 2012, ha llevado a cabo investigaciones sobre el suelo marciano. Al calentar muestras de suelo fueron detectadas e identificadas moléculas orgánicas simples por los sistemas de medición a bordo. 

También en la Viking en el 76 Una de las sustancias detectadas fue clorometano, que contiene átomos de carbono, hidrógeno y cloro. En opinión de los expertos de la NASA, sin embargo, este compuesto podría haberse formado durante los experimentos de calentamiento del suelo, por una reacción entre los percloratos en el suelo marciano y la química de a bordo. 

Por lo tanto, a pesar de que el cloro en el clorometano proviene de Marte, se consideró que el carbono y el hidrógeno habían sido llevados a Marte por el rover Curiosity. Curiosamente este tipo de material orgánico también fue identificado en los experimentos anteriores durante la misión Viking en 1976, pero el compuesto se consideró un contaminante terrestre. 

El equipo germano-británico de científicos dirigido por el profesor Keppler ha investigado si podría haber otra explicación para las observaciones de clorometano en Marte. Asumieron que el compuesto orgánico clorado gaseoso es de hecho derivado del suelo marciano, pero que su carbono e hidrógeno son proporcionados por los meteoritos. 

Para apoyar su hipótesis, los investigadores examinaron muestras de un meteorito que cayó en la Tierra en el año 1969 cerca de la ciudad australiana de Murchison. Según el profesor Keppler este material meteorítico contiene un dos por ciento de carbono. Expertos espaciales suponen que una cantidad relativamente grande de micrometeoritos con una composición similar a la de Murchison cae en la superficie de Marte cada año. 

Origen extraterrestre Cuando Frank Keppler y sus colegas calentaron la materia del meteorito Murchison en presencia de cloro observaron clorometano. «La relación de átomos de carbono e hidrógeno pesados y lígeros, conocidos como la huella digital isotópica de un gas, muestra claramente que el material orgánico tiene un origen extraterrestre», dice el profesor Keppler. 

Los científicos transfirieron sus resultados a las condiciones de la superficie de Marte que reciben los meteoritos de composición similar. «Por lo tanto, el clorometano que fue encontrado por las dos misiones a Marte podría ser formado por el suelo marciano, y el carbono y el hidrógeno tendría su origen en los micrometeoritos que llueven sobre Marte», explica el profesor Keppler. «Sin embargo, no puede descartarse que los microorganismos que podrían haber estado viviendo en el planeta hace tiempo podrían haber proporcionado una fracción de la materia orgánica».

ABC

miércoles, 5 de noviembre de 2014

The Martian



Planeta Marte, en un futuro próximo. La misión Ares 3 de la Nasa lleva unos días instalada en Acidalia Planitia. El grupo de seis astronautas planea realizar diversas exploraciones y experimentos en el paneta rojo, pero una intensa tormenta de arena les obliga a evacuar prematuramente. 

Durante la precipitada huida, Mark Watney, el ingeniero mecánico de la expedición, sufre un accidente aparentemente mortal y sus compañeros no tienen más remedio que dejarle atrás. Sin embargo, el avanzado traje espacial de Mark le mantiene con vida, y a duras penas consigue regresar al módulo habitable. A partir de ahí, comienza la lucha por la supervivencia en un planeta hostil del pobre Mark, que tendrá que exprimir su ingenio para seguir vivo un día más… 

The Martian es la primera novela del escritor americano Andy Weir, publicada en 2012. Al parecer, los editores rechazaron inicialmente su trabajo, y lo colgó gratis en internet. Posteriormente lo ofreció a bajo precio en Amazon, donde vendió 35.000 copias en 3 meses. Se trata de una ciencia ficción muy respetuosa con los aspectos científicos y tecnológicos. Las naves y la ingeniería están ligeramente más desarrolladas que en la actualidad, quizás unos 20 o 30 años. 

Weir describe con precisión el funcionamiento de los equipos y los problemas a los que se enfrentaría una misión tripulada a Marte. El trabajo de documentación debe haber sido muy exhaustivo. Pero a la vez, el autor traza una historia de lucha y superación, y de solidaridad humana, muy agradable y esperanzadora. Recuerda en este sentido a la historia de Apolo XIII. Todo ello salpicado con un humor un tanto gamberro y desenfadado, y constantes referencias a la cultura pop y geek del siglo XX. 

La novela resulta muy entretenida e interesante, al menos para los amantes de la exploración espacial y de la ciencia ficción realista. Es una novela que está cosechando buenas críticas y va a contar con una versión cinematográfica, ya que Twentieth Century Fox ha comprado los derechos.

Wiki

Imágenes de la sonda Phoenix




Descenso por la MRO







Panorámica